martes, 28 de septiembre de 2010

Vos. Vos tenes el poder de elegir ser feliz. De decir basta cuando no das más. De buscar algo mejor. De volver a empezar. De alejarte de lo que te hace mal. De estar bien. De perseguir lo que querés. De merecerte algo mejor, lo mejor. De exigir lo que es tuyo. De sobresalir. De hacerte notar. Poder de sonreír. De rodearte de gente que te cree sonrisas y no lágrimas. Que te acompañe y no te abandone. Que te apoye no importe qué. Que te quiera y no te menosprecie. El poder de amar y ser amada. De hacer tu camino. De pensar lo que quieras. De decir lo que pase por tu mente. De vestirte como se te ocurra. De comportarte como deseas. De gritar cuando lo creas necesario. De tener sueños y perseguirlos. De quedarte o irte. De decidir por vos misma. De hacer lo que querés con quien querés. El poder de elegir. Elegir lo que querés en tu vida, quién querés en tu vida. Elegir reír en vez de llorar. Elegir ser fuerte, sobrepasar todo obstáculo, todo desafío. Elegir que te gusta, que te apasiona. Poder de hacerte valer, de imponerte. De valorarte y amarte a vos misma. De que te valoren los demás. De que te aprecien. De ser vos misma. De conseguir lo que querés. De no rendirte, no parar. Solamente vos tenes ese poder. Reclámalo.

domingo, 26 de septiembre de 2010

Segura. Decisiva. Saber que quiero, cuando y cómo lo quiero. Ir a buscarlo. Conocer el tiempo de las cosas, cuando esperar y cuando avanzar. Tener confianza, confianza en mí conociendo todos mis defectos y virtudes. Estar consciente de que quiero conseguir. Y fluir, dejarme llevar sin perder las riendas en el camino. Pero principalmente, como base de todo, la seguridad. Seguridad en las personas, seguridad en que todo va a salir bien, pero lo más importante es seguridad en mí misma. Sé que quiero, y sé que puedo conseguirlo. No hay duda alguna. Por lo que ahora tengo el tiempo de la espera, la espera a que llegue. A que aparezca, cuando desee hacerlo. Y a partir de ahí salir de la pausa. Pero mientras tanto segura. Segura, de que estoy llegando a tiempo, a donde quiero y como yo deseé.

martes, 7 de septiembre de 2010

Círculo vicioso. Un círculo vicioso es eso repetitivo, ese conjunto de acciones, es el empezar y terminar en lo mismo. Como todo círculo vicioso es un vicio, algo adictivo, algo que se torna necesario y a la vez nocivo. Algo estúpido. Sin lógica, sin razón alguna. Te das cuenta de eso pero aún así seguís. Tenes momentos en los que salís pero de nuevo volvés a entrar. Sabes la consecuencia que tiene el seguir en ese juego pero esa misma consecuencia se transforma en la misma causa del no parar. El camino que tomamos para salir nos termina llevando al comienzo. Al principio divierte, entretiene hasta puede emocionar. Pero después se torna insoportable. Frustra darte cuenta que siempre llegas a lo mismo, molesta ver nuestra debilidad, nos enloquece volver a repetir el mismo error. Y en algún momento llegamos a nuestro propio límite. Nos supera todo. Y cortamos el círculo de una vez por todas.